Ministerios Elohim

El Tabernaculo

EL TABERNACULO

INTRODUCCION.

El tabernáculo, llamado en hebreo mishkán (מִשְׁכָּן, "morada"), fue el santuario móvil construido por los judíos en el desierto, durante el éxodo de Egipto, como lugar de adoración a Yaveh y en el que se resguardaban las Tablas de la Ley y el Arca de la Alianza (Éxodo 25:8), función que cumplió hasta la construcción del Templo de Jerusalén por el rey Salomón.

Se llevaba al frente de batalla cada vez que había una guerra. Los significados del Arca iban más allá de lo simbólico, tener el Arca era tener a Dios.

Su transporte y cuidado sólo estaba reservado a los levitas de la familia de Coath. Ella abría la marcha durante los años de expedición por el desierto y estaba siempre a la cabeza del pueblo (salvo excepciones).

Al plantar el tabernáculo un velo la separaba del santuario y al levantar la marcha, los levitas la envolvían en aquel velo Todo iba envuelto en una piel teñida de azul y en otra de color jacinto.

El Arca fue fijada en Silo. Más tarde los filisteos la tomaron en la guerra que mantenían contra los hebreos. En poder de aquellos estuvo unos meses, puesto que durante ese tiempo sólo causó estragos, muerte y tumores. Los filisteos horrorizados dejaron que el Arca fuese sola en un carro tirado por dos vacas. Después los animales pararon en Bet-semes., varios habitantes de aquel lugar murieron por el trato poco reverente que dieron al objeto sagrado.

De allí fue trasladada a Gabaá. Luego Saúl la utilizó en la campaña contra los filisteos. Posteriormente David con un acompañamiento solemne la trasladó a Sión, sin embargo de camino a Sión ocurrió un accidente: Usa un encargado del Arca, quiso sostenerla en un momento de bamboleo y cayó muerto de repente, David atemorizado la dejó durante 3 meses en casa de Obed - edom. Seguidamente desde Sión, la reliquia fue instalada en el templo de Salomón en tiempos de su reinado.

Su historia acaba según una carta enviada por los judíos de Jerusalén a los de Egipto (Macabeos, cap II, libro II), con su ocultamiento por el profeta Jeremías en una cueva del monte Nebó.

Actualmente los judíos tienen en sus sinagogas un cofre donde guardan la Torá y el cual representa el Arca de la Alianza , En 1989, un periodista británico, Graham Hancock, aseguró que la legendaria Arca Perdida no se encontraba perdida sino a salvo, escondida en una iglesia de Etiopía a donde había sido trasladada secretamente hacía más de 1000 años .

Vemos que la Torá explica y detalla los elementos e implementos necesarios para la elección del mishkán, que seria el centro de la vida espiritual de la nación hebrea durante   su pasaje por el desierto, y hasta la edificación del primer Bet HaMikdash -Templo en Ierushalaim/Jerusalén. Si prestamos cuidadosa atención al texto original, descubrimos que existe un paralelo de lenguaje (palabras y estructura sintáctica) y de contenido entre la construcción del universo por parte de Dios según es narrada al comienzo de la Torá, y la edificación que Él planificó para Su santuario tal como es descrita en la parashá Pekudei.
Tal como fuera enseñado por los Sabios de bendita memoria (Midrash Tadshé 2): "El mishkán fue construido de modo paralelo a la obra de creación" (similar en Bereshit Rabbá 3:12).
Apreciemos un ejemplo, entre varios (lamentablemente al estar traducido pierde mucho del impacto que surge al comparar los versículos hebreos).

"Así fueron terminados los cielos y la tierra y todos sus ocupantes. El séptimo día Elohim había terminado la obra que hizo, y reposó en el séptimo día de toda la obra que había hecho."
(Bereshit / Génesis 2:2)

"Así fue acabada toda la obra de la morada, el tabernáculo de reunión. Los Hijos de Israel hicieron conforme a todo lo que el Eterno había mandado a Moshé [Moisés]; así lo hicieron."
(Shemot / Éxodo 39:32)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

DESARROLLO

 

 

Uno de los conceptos más fundamentales que se desarrollan en toda la Escritura lo constituye el hecho de que Dios está preparando habitación para residir en medio del hombre, Dios viene. Las religiones en general se centran en ir a Dios. No obstante, la verdad bíblica nos asegura que Dios es el que viene a nosotros, es decir, a este mundo. El diseño del tabernáculo nos permite ver aspectos muy importantes de Su venida.

El Tabernáculo con sus detalles fueron revelados a Moisés en el Monte Sinaí (Éxodo 25:8-9, heb. 8:5). Pareciera que lo que Dios mostró a Moisés fue una visión del trono de Dios y de la "Nueva Jerusalén" para que Moisés hiciera un registro minucioso de lo observado. Este registro sirvió posteriormente para definir las especificaciones mismas del tabernáculo. El mensaje más importante arrojado en el estudio del tabernáculo es que nos habla del Camino hacia Dios. Esta afirmación se hará evidente cuando analicemos los componentes del tabernáculo.

 

ENTENDIENDO EL TABERNACULO

 

Inmediatamente a la firma del convenio hecho con Israel en el Monte Sinaí (Éxodo Capítulos 19-24), Dios ordena específicamente edificar una casa a fin de morar El en medio de su pueblo. Más adelante Dios declararía que este fue el propósito de sacar a Israel de Egipto (Éxodo 29:46).

"Y que hagan un santuario para Mí, para que Yo habite entre ellos. Conforme a todo lo que te voy a mostrar, conforme al diseño del tabernáculo y al diseño de todo su mobiliario, así lo haréis". (Éxodo 25:8-9)

En las instrucciones dadas a Moisés, el Señor enfatiza que Su santuario deberá ser construido según el patrón mostrado a su siervo en el monte (Éxodo 25:40 y 26:30).

En la foto (ver pagina siguiente) se muestra la disposición general del tabernáculo. El tabernáculo o tienda de reunión se situaba en medio de las tribus de Israel. Tres tribus por lado acampaban alrededor del tabernáculo. Una pared hecha de cortinas separaba el tabernáculo del pueblo mismo. Dentro del área se encontraba el altar de bronce, el lavatorio y el "Mikdash". El "Mikdash" se componía de dos recintos: (1) el recinto más interno denominado: Lugar Santísimo, y (2) el externo llamado: Lugar Santo. La presencia de Dios descansaba en el Lugar Santísimo o Kadosh HaKadoshin. Al Lugar Santísimo solo se podía llegar a través de la cámara externa o Lugar Santo. Para acceder al Mikdash debía primero pasarse por el altar de bronce y el lavatorio. Más adelante veremos como al aproximarnos a Dios, el altar y el lavatorio representan la limpieza por medio de la Sangre y la Palabra.

 

El Atrio

(Exterior)


En el atrio externo del Mikdash podían observarse otros dos instrumentos: (1) el altar de bronce (Éxodo 27:1-8), y (2) el lavatorio (Éxodo 30:18-21). Era en el altar de bronce donde se rociaba la sangre de los sacrificios que cubrían los pecados del pueblo. Después de la realización del sacrificio y antes de entrar en el Mikdash, el sacerdote lavaba sus manos y pies en el agua contenida en el lavatorio. Ambos artefactos representan la limpieza por la sangre y la limpieza por medio de la palabra (Efesios 5:26) en nuestra aproximación a Dios.

Tabernacle diagram

 

 

Podemos decir  entonces que. Jesús el Mesías  es la "luz del mundo" (Juan 8:12) y el "pan vivo que desciende del cielo" (Juan 6:51). Quedó establecido además que El vive para hacer intercesión por nosotros (Hebreos 7:25). Vemos como el Mesías plenamente funciona en cada área del Lugar Santo. Adicionalmente, en sí mismo el Velo corresponde a Su propia carne (Hebreos 10:20) y además tenemos el testimonio que cuando El murió en la cruz, dicho velo se desgarró en dirección de arriba hacia abajo (Lucas 23:44-46).

 

 

 

 

 

A )   El Altar de Bronce

 (Éxodo 27:1-8)

 

 

El altar del holocausto representa la salvación y las dos varas significan las dos características que como cristianos tenemos que tener para llevar todos los días nuestra salvación, recordemos que el pueblo de Dios no podía irse sin las dos varas, fueron trasladados por todo el desierto con ellas. Cuáles son las dos varas de la salvación? El temor y temblor como dice en Filipenses 02:12 ...Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en en mi presencia solamente sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor.... En Isaías 08:13 dice ...A Jehová de los ejércitos, a El santificad, sea El vuestro temor, y El sea vuestro miedo... en otras versiones en lugar de decir miedo dice temblor. Este temblor se refiere a que no debemos de tomar la salvación sin cuidado alguno, como que no vale nada. En Hebreos 10:29 dice ...cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrentar al Espíritu de gracia?...

Es el primer objeto que se encontraba al entrar al atrio. Sus dimensiones eran: 5x5x3 codos, de manera que era cuadrada, símbolo que recuerda el alcance universal del Sacrificio de la Cruz (4 vientos, 4 puntos cardinales, etc.). El altar es una figura de Cristo (madera de acacia, o de Sittim), pero de Cristo como objeto de juicio de Dios sobre el pecado (bronce) (ver Números 16:36-40).

 

La finalidad esencial del altar era la de ser el lugar donde se ofrecía los sacrificios y se vertía la sangre, la única que hacía expiación sobre el altar por las almas (Levítico 17:11; ver también Hebreos 9:22. "Sin derramamiento de sangre no se hace remisión). El altar nos habla de Cristo; los sacrificios nos hablan de Cristo, el sacerdote nos habla de Cristo. El conjunto de lo que sucedía en el altar nos presenta la cruz. Dos verdades fundamentales se desprenden del altar de bronce y de los sacrificios que eran ofrecidos en él.

a.    La necesidad de la sangre para quitar el pecado. Esta verdad es puesta en evidencia desde Génesis hasta Apocalipsis: "La paga del pecado es muerte" (Romanos 6:23); la sangre derramada nos habla de la muerte del culpable o de una víctima ofrecida en su lugar. No hay otro medio para quitar el pecado de delante de Dios;

  1. La doctrina esencial de la sustitución: según el pensamiento de Dios, una víctima sin defecto puede ser ofrecida en lugar del culpable, tal el carnero ofrecido en lugar de Isaac (Génesis 22), o el cordero de la Pascua que murió en lugar del primogénito (Exodo 12). "Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos" (1 Pedro 3:18); "al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado" (2 Corintios 5:21).

La rejilla de bronce del altar, la que soportaba el fuego del juicio, nos recuerda también a Cristo, quien pasó a través del fuego del juicio de Dios. Al ser así sondeado en todo su ser, no manifestó más que sus propias perfecciones.

Los sacrificios eran ofrecidos sobre el altar: holocausto, ofrendas vegetales, sacrificios de peces, sacrificios por el pecado o por la culpa (Levítico Caps. 1 al 7).

Detengámonos un momento en el sacrifico por el pecado, tal como es presentado en Levítico 4:27-35. He aquí un ejemplo de un israelita que, habiendo desobedecido uno de los mandamientos de Jehová, "se hiciere culpable"  y que luego consiente de su pecado. Es el Espíritu Santo el que convence de pecado por medio de la Palabra. Durante mucho tiempo un hombre puede permanecer indiferente a los pecados que cometió, así como también a su estado de pecado delante de Dios, pero llega un momento en que, en su gracia, Dios interviene por medio de su Espíritu para producir en él ese sentimiento de culpabilidad. ¿Qué debe hacer entonces? El israelita debía: "traer su ofrenda" una cabra o un cordero sin defecto (v. 28,32). No bastaba saber como debía proceder para que el pecado fuese perdonado, sino que era preciso traer efectivamente una ofrenda: Ir a buscar en su rebaño un animal sin defecto y atravesar todo el campamento para conducirlo hasta la puerta del atrio para llevarlo al altar. Llegado ahí, el israelita debía poner su mano sobre la cabeza del sacrificio, colocando así sobre esta víctima inocente y sin defecto, el pecado del cual se había reconocido culpable. Luego, él mismo debía degollar la víctima. Es preciso que uno  personalmente vaya a la cruz, que reconozca su pecado, que acepte que este haya sido llevado por la Víctima santa, "sin mancha y sin contaminación" (1 Pedro 1:19), castigada por el juicio de Dios en lugar del pecador.

El Sacerdote tomaba la sangre de la víctima, la ponía sobre los cuernos del altar y vertía el resto al pie del altar; luego quemaba la grasa y hacía propiciación por el culpable. Este sacerdote nos habla de Cristo, quien lo hizo todo por la purificación del pecador. La Palabra declara entonces formalmente en dos ocasiones: "y será perdonado" (v.31 y 35). El israelita podía volver a su tienda con la seguridad de haber sido perdonado, no porque sintiera algo en sí mismo, sino porque estaba escrito en la Palabra inspirada: "Y será perdonado". Igualmente hoy, la obra de Cristo nos da la seguridad de la Salvación, pero es la Palabra de Dios la que nos da la certidumbre de ello: "El que cree en el Hijo tiene vida eterna" (Juan 3:36; ver también Hebreos 10:10 y 14). Si alguien no esta seguro de su salvación, tome su Biblia y bajo la mirada de Dios acepte lo que esta escrito y créalo.

Para los holocaustos (Levítico 1) el israelita que se acercaba al altar debía también "poner su mano sobre la cabeza del holocausto" (v.4.). En este caso no se trataba de ser perdonado; aquel que traía la ofrenda ya estaba perdonado, pues precedentemente había tenido que traer un sacrificio por el pecado. Ofrecía este holocausto como prueba de agradecimiento y de adoración. De alguna manera los méritos de aquella. Dios "nos hizo aceptos en el Amado" (Efesios 1:6). Dios ve a los suyos en Cristo; a causa del holocausto que sube "a Dios en olor fragante" (5:2).

 

El Altar de Bronce ya hacia en el suelo, sobre la arena estaba al alcance de todos no tenia escalones, nadie podía acercarse con las manos vacías y el ofrendante tenia que poner sus dos manos sobre la victima presionando la cabeza del animal con esto estaba diciendo que le transfería su culpa a la ofrenda levítico 1:4.

 

En Exodo 27:03 dice: …Harás también sus calderos para recoger las ceniza, y sus paletas, sus tazones, sus garfios y sus braseros, harás todos sus utensilios de bronce… El altar del holocausto, necesitaba cinco instrumentos para poder ser trabajado: Caldero para meter las cenizas, palas o paletas, tazones, garfios o tenedores y braseros, esto representa los cinco ministerios que Dios ha dejado para preparar a la Iglesia de Cristo, una vez más vemos la gracia de Dios. Los calderos era como para mostrar que el cordero había sido inmolado, hecho cenizas y luego se levantó, esta es la tarea que hace el evangelista, el que muestra el sacrificio de Dios. Las paletas o palas servían para poner todo en su lugar, vemos que esa tarea la cumple el pastor, que tiene que ir viendo que todo sea llevado a un mismo lugar. Los tazones servían para la aspersión, con ese instrumento entraban y comenzaban a rociarlo todo de sangre, pero tenían que rociarlo rápidamente para que no se coagulara y mostrar la sangre a todos, esa tarea la debe hacer el Maestro que es el que enseña el sacrificio de Cristo a todos, en Hebreos 10:20 en las versiones normales dice que hay ahora un camino nuevo y vivo, pero en el original dice un camino nuevo y sangre fresca, es decir que la sangre de Cristo todavía está fresca para el que la quiera ver. Los garfios o tenedores se utilizaban para que cuando se presentaban las ofrendas, con eso se sacaba la carne, el que le saca la carne a uno para dejarlo espiritual son los profetas, David creyó que nadie sabía de su pecado oculto, y llegó Natán a hacerselo visible. Los braseros era donde se guardaba el fuego, siempre el fuego de Dios se tenía que guardar, por eso le decían a Timoteo: "Aviva el fuego que hay en tí", esa tarea la cumple el Apóstol que se encarga de que el fuego de Dios nunca se apague.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

B )    La Fuente de Bronce

 (Éxodo 30:17-21; 38:8)

 

 

En la consagración de Aarón y sus hijos estos eran bañados completamente una vez y para siempre (Levíticos 8:6); y posteriormente los sacerdotes para servir tenían que lavarse las manos y los pies únicamente. Nadie podía entrar al lugar santo sin pasar por el lavacro de bronce y cuando salían del lugar santo tenían que volverse a lavar las manos y los pies, el altar de bronce era accesible a todos, pero el lavacro solo a los sacerdotes. El lavacro nos enseña la necesidad de una limpieza diaria para agradar aquel que nos capacito al servicio santo, el baño completo que es el bautismo es solamente una vez y después de esto solo nos queda la necesidad de una limpieza diaria constante del creyente sacerdote, recordando que en el altar de bronce hay salvación y en el lavacro hay purificación.

La Fuente de Bronce, cuyas dimensiones no nos han sido dadas, estaba situada entre el altar de Bronce y el Tabernáculo. No servia para ofrecer sacrificios, sino para lavarse en ella, lo que Aarón y sus hijos debían hacer cada vez que entraban al altar para ofrecer un sacrificio. el lavacro donde se lavaban con agua, esto es el bautismo en agua.

En Juan 13 el Señor Jesús mismo nos muestra el significado  de la Fuente de Bronce. Al celebrar la ultima cena con sus discípulos, Él se levanta de la mesa y se pone a lavar los pies de ellos. Pedro no quería que lo hiciese con él, pero Jesús le dice: "El que esta lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues todo esta limpio" (v.10).

Para aquel que tiene todo el cuerpo lavado, es decir, que ha pasado por el nuevo nacimiento a la conversión no es necesario repetir lo que  ha sido cumplido una vez para siempre (Tito: 3:5); pero ocurre demasiado a menudo que el creyente, a causa de la carne que está aun en él, ha pecado, ha manchado sus pies en el camino. No se trata entonces de ser "convertido" de nuevo, sino de que sus pies sean lavados. El Señor muestra por medio de la Palabra en que se ha faltado; luego es preciso confesar su falta a Dios (1 Juan 1:9) y recordar que por ese pecado Cristo murió (véase también la figura de la novilla roja en Números 19). Una vez que el rescatado lavó así sus pies, puede tener parte con el Señor, es decir, gozar de la comunión con Él. Pregunto ¿Por qué no practicamos en el Templo?.

En efecto: cuando un creyente ha faltado, la comunión con el señor se interrumpe. No hay más gozo, ni gusto por la Palabra. La salvación no se pierde. La vida eterna está siempre allí, pero hay una nube. Es necesario pues, volver al Señor, confesarle la falta, discernir sus causas juzgándose a uno mismo, recordar la eficacia de sus sacrificios, y entonces es cuando uno es restaurado. Pero recordemos siempre que todos los recursos están a nuestra disposición para no ceder al pecado, tal como lo escribe el apóstol Juan: "Estas cosas os escribo para que no pequéis" (Juan 2:1).

Es importante realizar cada día ese juicio de nosotros mismos y ese lavamiento de los pies; pero, así como los sacerdotes debían hacerlo antes de entrar en el santuario o antes de acercase al altar, es particularmente importante que lo hagamos, cada uno para sí, antes del culto y antes de tomar parte en la cena, según la enseñanza de 1 Corintios 11:26-32. En esos versículos se nos revela que cualquiera que come el pan o bebe la copa del Señor indignamente será culpable respecto del cuerpo y de la sangre del Señor. Pero no se agrega que a causa de la mancha del camino sea menester para abstenerse de la cena; al contrario, se añade: "pruébese cada uno así mismo, y coma así". Antes de entrar en el santuario, juzgarse a sí mismo, pasar por la fuente de bronce, y así comer. Con un profundo sentimiento de lo que es la gracia que, a causa únicamente de la obra de Cristo, nos permite acercarnos, se participará en el memorial de su muerte para responder a su último deseo.

Descuidar el diario juicio a nosotros mismos y participar de la cena en tal estado nos expone a juicio del Señor. Así muchos en Corinto estaban débiles, enfermos o incluso dormían, es decir, estaban muertos; pero vemos en ello una enseñanza también moral, pues si dejamos de enjuiciarnos a nosotros mismos y tomamos la cena con ligereza (abstenerse en tal vez aún más grave), estaremos espiritualmente débiles, o enfermos (¡Una oveja enferma se aparta del rebaño!), o incluso seremos vencidos por el sueño espiritual (Efesios 5:14). Si tal es el caso, cuan importante es despertarse, "levantarse de los muertos" (V.M) para reencontrar la luz de la faz de Jesucristo.

La Fuente de Bronce había sido hecha con los espejos de las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo de reunión (Éxodo 38:8). Ello configura una doble enseñanza:

a.    Los espejos nos hablan, según Santiago 1:23, de la Palabra de Dios, la cual pone en evidencia nuestras faltas, la suciedad de nuestros pies;

  1. Las mujeres que se allegaban al Tabernáculo de Reunión con aquellos que buscaban a Jehová (Éxodo 33:7) tenían un corazón dispuesto para Él. Como gozaban de su Presencia, les fue fácil abandonar gozosamente por el Señor lo que precedentemente era objeto de vanidad.

 

 

 

 

 

 

El Lugar Santo

(Éxodo 25:23-40 y 30:1-10)

 

En el Lugar Santo se encontraban tres componentes: (1) La Mesa de los Panes de la Presencia o Proposición (Éxodo 25:23-30), (2) (la Menorah) el candelero, (Éxodo 25:31-40) y el Altar del Incienso (Éxodo 30:1-10). Estos componentes unidos a la figura de Moisés y Aarón nos revelan un cuadro perfecto del Mesías.

En el lugar santo no todas las personas podían ingresar, solo los sacerdotes ingresaban cada semana a realizar sus servicios a Dios.

 

A )   La Mesa de los Panes de la Proposición

(Éxodo 25:23-30; Levítico 24:5-9)

 

 

a)   La mesa, de pequeñas dimensiones (dos codos de largo, un codo de ancho y 1½ codo de alto) era de madera de acacia (o de Sittim), cubierta con una lámina de oro puro, .aquí esta  representado a la humanidad, con la característica blanca, dura, con nudos y difícil de trabajar; y mostrando al mismo tiempo a Jesús quien tomo forma de hombre ( Juan 1:14) ; (Fil. 2:6-8). El oro representa el origen divino de Jesucristo. Por sus dimensiones el sacerdote tenia que inclinarse para tomar el pan y comerlo de pie, esto nos da una enseñanza de humildad.

 

b) Los panes sobre la mesa, en número de doce (Levítico 24:5-9), Hechos de flor de harina, recubiertos de incienso, como la ofrenda vegetal (Levítico 2).Se colocaban sobre la mesa doce panes  o tortas de flor de harina en dos grupos de seis panes cada uno y su peso era aprox. 4.5 Kg. Y encima de cada fila se colocaban incienso de olor grato para El Señor ( lev. 24:5-9); Este pan representaba al verdadero que descendió del cielo, es decir Jesús, el numero 12 representa el gobierno de Dios, el cual será cada vez mas real en nuestras vidas, en la medida que conozcamos la verdad.

 

 

 

 

 

 

 

 

  B )   El Candelero

 ( Éxodo 25:31-40; Levítico 24:1-4; Números 8:1-4)

 

 

Contrariamente a los otros objetos del Tabernáculo hechos de madera de Acacia recubierta de oro, el candelero era totalmente de oro puro, forjado en una sola pieza. Él nos habla de  la divinidad del Señor. Era de oro batido ("labrado a martillo"), recordando que aquel,  a quien representa Cristo pasó por el sufrimiento. El becerro de oro, por el contrario, había sido simplemente fundido (Éxodo 32:34). El propio candelero, pues es una figura de Cristo, mientras que el aceite es, como en toda la Palabra, una figura del Espíritu Santo.

 

Uno de los elementos del candelero que es mencionado varias veces lo constituyen las flores de almendro. Esas flores nos hacen pensar en la vara de Aarón que había brotado, producido flores y almendras, tal como vemos en Números 17:8, lo que es una figura de la resurrección de Cristo. El almendro, según Jeremías 1:11-12, manifiesta que Dios cumple sus promesas en Cristo. Precisamente fue un Cristo resucitado y glorificado el que dio el Espíritu Santo a los suyos.

 

El candelero que nos representa la palabra de Dios revelada y ungida, en cada lugar del tabernáculo se manifestaba una luz diferente y esto nos habla de Cristo ungido resucitado y glorificado. Tenia tres brazos de cada lado y por todo tenia 66 piezas que nos hablan de los 66 libros de la Biblia, también tenia 07 brazos ,esto nos habla de la completa y perfecta revelación de Dios, y el aceite nos habla de la unción del Espíritu Santo.

En el conjunto formado por el candelero, el aceite y las siete lámparas ardiendo en el santuario se puede ver también a Cristo tal como es presentado por el Espíritu Santo por mediación de los vasos humanos del ministerio.

En efecto, bajo este aspecto, había necesidad de "despabiladeras" (Éxodo 25:38) para quitar todo lo que habría impedido el libre curso del aceite para producir la luz. Por otra parte, las siete lámparas nos muestran que el ministerio de Cristo por el Espíritu se ejerce mediante diversos canales.

Vemos al candelero brillar bajo los siguientes aspectos:

a.    Hacia delante de él (Éxodo 25:37), pues el mayor y primer testimonio que da el Espíritu Santo es respecto del mismo Cristo; por eso el primer objeto que atraía las miradas al entrar al santuario era el candelero totalmente iluminado.

El Señor Jesús, al hablar del Espíritu Santo, dice: "Él me glorificará; porque tomara de lo mío, y os lo hará saber" (Juan 16:14).

  1. El candelero iluminaba la mesa de los panes (Éxodo 26:35); es el Espíritu Santo Quien  nos trae la revelación

 

  1. El candelero brilla en el libro de Números 8:1  en relación con la purificación de los levitas: es el Espíritu Santo quien debe dirigir todo servicio para Dios.

 

C )    El Altar del incienso.

 (Exodo 30:1-10)

 

 

El Altar de Oro, o altar del perfume. era de dimensiones mucho más reducidas que el Altar de Bronce, o sea un codo de ancho, un codo de largo (cuadrado) y dos codos de alto, tenia  que ser quemado el incienso.   Era de madera de Acacia cubierta de oro puro y nos habla esencialmente de Cristo. Ubicado frente al velo (v.6), esta legítimamente ligado al Arca y al Propiciatorio.

 

Se nos habla en el tabernáculo de dos altares el primero de bronce representa a cristo crucificado o sacrificado como el cordero pascual y el segundo el altar del incienso habla del Señor resucitado y ascendido, este segundo altar tipifica el triunfo de cristo y el que hoy tengamos un mediador. Al primer altar todo Israel tenia acceso ,pero al segundo altar solo los sacerdotes y  aquí no se sacrificaban victimas, solo  la fragancia de las especies tenia que ascender continuamente hacia Dios.

 

En el Altar del incienso; el sacerdote ofrecía el incienso, mientras afuera el pueblo oraba (Lucas 1:9-10).

 

En el Altar del incienso,  el Sumo Sacerdote intercede por el pueblo, tal como Cristo en Juan 17, Hebreos 7:25 y  Romanos 8:34.

también representa  la comunión intima con el Señor, porque es alli donde levantamos nuestra oración a Dios, la cual sube como incienso ante El.. salmos 141:2.

 

El incienso era únicamente para Dios (Exodo 30:34-38); ni podía ser ofrecido más que en el lugar Santo y no debía ser consumido por fuego extraño, sino solamente por el fuego  tomado del Altar de Bronce (véase Nadaba y Hábil en Levítico 30:34-38).

 

 

 

El Lugar Santísimo

(Éxodo 25:10-20)

 

Dentro del Lugar Santísimo se hallaba el Arca del Pacto ocupa el primer lugar, también llamada Arca de la Alianza (Éxodo 25:10-22). Descansando sobre el arca estaba el  propiciatorio que era de oro puro. sobre el propiciatorio, se encontraba la sangre de la víctima; que el sacerdote había llevado allí el gran día de la expiación (Levítico 16:14-15)

Integrados al Jacaporet se hallaban frente a frente dos Querubines. Cada Querubín miraba hacía abajo significando la manera de acercarse a Dios. nos están diciendo que "Dios nos encontrará aquí, sus rostros admiraban la sangre que el sumo sacerdote una vez al año depositaba”.

Los querubines no tenían una espada como en Edén, sino;  al contrario  alas,,para proteger y sus rostros uno enfrente del otro – estaban vueltos hacia el propiciatorio, es decir, ¡miraban la sangre!.

 

 

El conjunto – el Arca, el Propiciatorio y los Querubines –  ya no seria  el  trono de Dios del juicio, sino el de la gracia. Todo nos habla de Cristo y de su obra; vemos en ello, de una manera sorprendente y profunda, cómo Él respondió plenamente a la justicia y al amor de Dios (Salmo 85:10, 89:14) el trono de la gracia esta fundado sobre la obediencia de Cristo hasta la muerte.

 

El lugar santísimo es figura de nuestro  espíritu como parte mas intima de nuestro ser, también es figura del cielo.

EL VELO: Del lugar santísimo estaba formado por 4 columnas de madera  de acacia cubierta de oro, sus  capiteles de oro y sus bases de plata. Tenia un velo de lino torcido, azul, púrpura y carmesí, labrado con querubines. el velo separaba el lugar santo del lugar santísimo.   ex. 26:31,32,33.

También representa a los cuatro seres vivientes que tenían cuatro rostros, que nos hablan de la perfección de cristo en su ministerio  y los cuatro evangelios del cordero.

 

A )    EL ARCA DEL PACTO.

 

Era de madera de acacia cubierta de oro por dentro y por fuera, media dos codos y medio de largo por un codo y medio de ancho y codo y medio de altura.

El arca del pacto contenía  una vasija  de maná , la vara de Aarón que reverdeció y las tablas del pacto ( heb.9:4).

El sumo sacerdote una vez al año hacia expiación por el pueblo llevando la sangre del sacrificio para esparcirla 7 veces sobre el propiciatorio (ex. 16:14)

 

B )   El Propiciatorio

 (Éxodo 25:17-21)

 

 

El Arca era un cofre y tenía una tapa llamada propiciatorio. El término hebreo traducido por propiciatorio deriva "cubrir o cubierta". En el Antiguo Testamento, la propiciación (expiación en la Reina-Valera 1960) de los pecados significa que estos eran "cubiertos", como en el Salmo 32:1; mientras que en el Nuevo Testamento, una vez que la obra de Cristo fue cumplida, los pecados son "quitados" (Hebreos 9:26; 10:4, 11-18). La palabra propiciatorio, traducida en la versión alemana por "Gnadenstuhl" y en la versión inglesa por "mercy-seat" (sea "el asiento de la gracia")- contiene también la idea de gracia, de misericordia.

 

  El propiciatorio era el lugar de encuentro de Dios con el hombre en un doble sentido:

a.    Aarón, el sacerdote, representando al pueblo ante Dios, acudía con la sangre.

  1. Moisés, el enviado de Dios, el apóstol, recibía allí los mensajes de Dios para el pueblo (Éxodo 25:22).

El Señor Jesús, en Hebreos 3:1, reúne el doble carácter de Moisés y de Aarón cuando . . es llamado el "apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión".

 

 

 

 

C )   Contenido del Arca

 (Hebreos 9:4)

 

a.    Las Tablas de la Ley

Las primeras tablas habían sido quebradas ente la idolatría del pueblo (Éxodo 32:19). Las segundas tablas  son presentadas en Deuteronomio 10:3-5 como no hechas hasta después de la construcción del Arca y colocadas allí en cuanto a Moisés descendió del monte: solo Cristo podía cumplir la ley de Dios (Salmo 40:8); solo a causa de Él, figurado por el pueblo.

  1. La Vasija de Oro (Éxodo 16:32-34)

Esta vasija de oro que contenía el maná nos presenta dos pensamientos:

·         La fidelidad de Dios, quien durante cuarenta años había alimentado a su pueblo a través del desierto; convenía tenerlo presente: "te acordaras de todo el camino" (Deuteronomio 8:2).

·         Ella es un memorial de Cristo descendido del cielo, pan de vida, alimento de su pueblo en el desierto (Juan 6:31-38, 58).

Cabe señalar al respecto que los israelitas recogían cada día un omer de maná; tal es nuestra parte: alimentarnos de Cristo cada día.

La Vara de Aarón (Números 17)

Esta Vara  le brotaron flores y almendras, nos habla de la gracia y de la resurrección. Así, todo lo que el Arca nos enseña es  acerca de la Persona de Cristo . El almendro es el primer árbol que flórese en la primavera; por eso habla de una nueva vida después de la muerte ( el invierno), en otras palabras la vara esta relacionada con la resurrección del señor Jesucristo.

 

 

 

 

 

 

CONCLUSIÓN:

 

El Lugar Santo representa al Mesías por medio de quien podemos acercarnos a Dios. Este es verdaderamente el significado de la declaración hecha por Jesús en Juan 14:6 donde El proclama que es el Camino, el único acercamiento al Padre. Jesús proclamó que El es la Luz el Mundo (Menorah) y el Pan de Vida (Pan de la Proposición). Adicionalmente, la Biblia nos habla de que El hace continuamente intercesión ante Dios por nosotros (Altar del Incienso). El velo representa el acceso restringido a Dios mientras se está en la carne. Por supuesto, Jesús ha traspasado este velo sentándose a la derecha de Dios. Conocemos a Jesús en el Espíritu y en consecuencia, vemos al Señor glorificado por el Padre. Eventualmente, nosotros también atravesaremos este velo para estar ante Dios.

 

el gobierno de Dios, el cual será cada vez mas real en nuestras vidas, en la medida que conozcamos la verdad.